19 agosto 2015

Manterse en pie

Esta mañana, ha venido. Se ha presentado sin avisar, y casi, casi me engaña. Hacía mucho tiempo que no se acercaba a mi casa y a punto he estado de dejarle entrar.

Estaba haciendo las cosas cotidianas, sin mayor importancia, que lo que tiene hacer correctamente lo de a diario: Estaba en la cocina, entre verduras, huevos, harina, sartenes, fuegos...
Cuando he notado su presencia fuerte. Entonces caí en la cuenta y como S. Ignacio nos explica en las reglas de discernimiento y para la oración, lo he tratado de aplicar... 

He avivado todos mis sentidos, sin bajar la guardia, he tratado de ver por donde llegaba y que "grieta" o "rendija" ha podido percibir, para aproximarse al menos a mí.

Y de pronto se amontonan pensamientos que no son "ciertos", tratando de ocupar mi mente en primer lugar, pensamientos que buscan confundirme y crear caos y conflicto....
Se aproximan "voces" que suben el volumen, y tratan de acallar otras voces que me hablan en positivo, y me invitan al riesgo, a LA CONFIANZA, A DEJARME... A SABER ESPERAR, A CONFIAR EN LA PALABRA, Y EN DIOS, como en tantas ocasiones....

Casi, sin poder apreciarlo, mi piel también se estremece... y busca dar respuestas..., la biología responde rápido ante cualquier "amenaza".

Y ahi, batiendo huevos y harinando carne, me he enfrentado sin más vacilación al "MIEDO", si ese "fantasma" que a veces, se presenta, queriéndonos confundir, apartar del CAMINO EN DONDE ESTAMOS, tratando de desviarnos del HORIZONTE que se abre y expande ante nosotras....

Pues sin más, me he puesto "a dialogar" con él, como con las distracciones en la oración:

"le explico" que no es momento, que estoy ocupada... ¿no lo ve...?, que esos "argumentos" ya los conozco y no son reales, que hay otras voces, otras experiencias, otras vivencias que me hablan de VIDA, DE VERDAD, DE SUPERACIÓN, DE CAMINO, DE AMOR, DE COMPAÑERAS Y COMPAÑEROS DE VIAJE, DE CONFIANZA, DE EXPERIENCIA, DE RODAJE....

Y como preciosamente canta Manolo García, le hablo del "bagaje" que me deja la vida... de lo que aprendo en el riesgo y la confianza....


Y poco a poco, noto que esa "sensación de estar entre la espada y la pared", de sentir "miedo sin fundamento a lo desconocido", va desapareciendo, y recobro nuevamente la calma, la paz....

Me yergo, y respiro hondo, me siento en paz, miro alrededor y reconozco dentro y fuera MI HOGAR, MI CASA.... todo está en orden...

 A los "fantasmas" se les "cae la sábana" cuando los enfrentas y les hablas con VERDAD.

Respiro profundo y agradezco en una oración....


¿Alguna vez has sentido miedo? ¿A qué?
¿Había causas fundadas para este miedo...?
¿Cómo afrontas tus miedos?
¿Qué fortalece tu vida?
¿Cuáles son tus "anclas" donde te amarras firmes ante las "tempestades"?