18 abril 2014

LA CRUZ DE JESÚS...

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Más de siete palabras...
 
UNA ÚNICA:
 
UN CORAZÓN ABIERTO Y TRASPASADO

LA REVOLUCIÓN DE LA TOALLA


Después de compartir la cena, Jesús nos invita a vivir desde sus actitudes, nos invita a cambia de posición en nuestra vida, y ponernos como él a servir a los demás…

Inicia un revolución silenciosa, opuesta a las diferentes revoluciones que estamos asistiendo… traemos aquí los conflictos del mundo, de nuestra sociedad…

Jesús, se despoja del manto. Se quita el poder, el prestigio…

Y lava los pies de sus discípulos…

Jesús inicia la REVOLUCIÓN DE LA TOALLA… la revolución del servicio… de ponerse en el lugar del más débil, haciendo la función que tenían los esclavos, los niños, los que no contaban en la sociedad…

En este rato de oración JESÚS nos acerca a vivir con ÉL  la revolución de la toalla… , haz silencio y déjate sorprender por sus gestos, para que transformen tu vida…

…..
Visualiza a Jesús, que te llama y te invita… te ha invitado a su Pascua, en esta Pascua…

Acércate a El y pregúntale “¿Dónde quieres que preparemos la Pascua…?

…Deja que él te diga el lugar…

Cuando sepas el sitio llama por teléfono a tus amistades, pásales un wasp… , queda con ellos para la cena….(quiénes son tus invitados….?)

Elige bien a las personas que quieres que esta noche estén contigo… No olvides a nadie de las personas que tú amas y que deseas que aprovechen la oportunidad de estar con JESÚS….

Cuando termines la lista de invitados y las llamadas…. Ve a preparar el comedor… contempla el lugar, el mantel, los platos… los detalles…

Hazlo con cuidado y delicadeza pensando en cada invitado… Quizá puedes poner velas, flores…. Ponlo a tu gusto… Disfruta de este momento…

Es la hora prevista… ves llegar a los invitados… los recibes, míralos con detalle… sus gestos, tus palabras de recibimiento…

El último en llegar es Jesús… Ábrele … salúdale… “Señor no soy digna de que entres en mi casa”…

Acompáñale al comedor, preséntales a todas las personas que te acompañan…

Coloca a los invitados… a Jesús… al que se sienta a su izquierda, a su derechas… ve situando a cada uno y no olvides qué lugar ocupas tu.

 LECTURA DE LA PALABRA (Jn 13,2,17) –contemplación ignaciana-