Estos días me venía continuamente la imagen del CORAZÓN DE JESÚS... mes en el que estamos al que tenemos devoción cierta generación de hermanas, además de ser un rasgo muy característico de nuestra espiritualidad, y "testamento de nuestra fundadora", que nos dejo dicho "encargo que propaguen cuanto puedan la devoción al corazón de Jesús".
Y a la vez me venía otra imagen. La de un diafragma fotográfico... Sí el diafragma precisa una apertura continua, y a la vez regulada, para que la foto sea buena, y tenga la medida la luz, el contraste que se requiere en cada momento...
¿Ahora...?cómo unir estas dos imágenes....
No sé pero intuyo algo como:
Captar...
Luz...
Apertura...
Reflejo...
Imagen...
Llevo días tratando de serenar - mejor dicho, de que Otro serene mi corazón- me percibía como el diafragma de la cámara, cerrado, por tanto inútil, sin función, inservible...
Pasando una temporada un poco "cerrada" por fín... a través de circunstancias, oraciones, ENCUENTROS... en mí se ha producido una pequeña apertura... por cualquier grieta, puede entrar la Luz de Dios, basta una rendija para que se desborde la Luz...
Pues eso voy notando como poco a poco el "diafragma" se vuelve a abrir, y soy capaz de "captar otras imágenes, secuencias, escenas..." con los mismos "personajes" que acompañan mi vida, pero con otra luz y otro tono...
Y el corazón de Jesús dónde lo dejo, dónde lo pongo....
Ya he dicho que hay devoción a esta espiritualidad (no se me mal interprete, ni confunda con "ñoñerías" de épocas pasadas...), dentro de mi congregación, y cierta generación de hermanas en época de formación compartimos muchos momentos de oración, de encuentro, de diálogos, búsquedas, fiestas en torno al una nueva "imagen" de lo que significa el CORAZÓN DE JESÚS HOY para nosotras.
La primera vez que estuve en Roma, tuvimos visita inevitable al Gesú, a la iglesia de nuestros hermanos jesuítas... (quiénes me conocen, dirán estabas tardando en sacarlos....).
Bueno pues en el Gesú, un jesuita que nos acompañaba nos contó que una vez, entró un joven un tanto agitado a la iglesia...., camino hacia adelante, y a la derecha del altar, hay una pequeña capilla, con un cuadro antiguo de cierta época, en el que está representado una imagen clásica del Corazón de Jesús.
El joven se arrodilló ante él, y estuvo largo rato allí....
Después de esto se dirigió a la sacristía a buscar a "alguien" que le explicará quién era el de aquella pintura, y qué representaba.
Un jesuíta, le explico que era el Corazón de Jesús. Y con mucha sencillez y simplicidad, le contó que era JESÚS, nuestro Señor, ofreciendo su CORAZÓN al mundo, a cada hombre y mujer.
Expresando ahi su entrega, su vida, sus sentimientos.
Hoy ese joven "desorientado", es un jesuita....
No sé muy bien toda la trama de fondo que tienen esta entrada, solo me viene una cita que me acompaña desde mi juventud. Hch 8, 26... Cómo puedo entender si nadie me hace de guía.
Y qué mejor Luz que la del AMOR DE JESÚS, representado en su corazón.
(imagen del Corazón de Jesús en la Iglesia del Gesú, Roma)
¡¡ Que tu misericordia, Señor, venga
sobre nosotros, como lo esperamos de Tí !!