Será que nuestra vida
tiene que ser reflejo de la vida y enseñanza de Jesús, nuestro maestro
en sus gestos, palabras, enseñanzas, actitudes...
Será que nuestros pequeños gestos diarios pueden ser SEMILLA
DEL REINO, si confiamos en su Amor..
Ayer celebrábamos la fiesta del SAGRADO
CORAZÓN DE JESÚS...
¿No consistirá por tanto nuestra vida en hacer de ella
SEMILLAS QUE GERMINEN EN VIDA y FECUNDIDAD...?
Nuestra vida es semilla desde:
UNA SONRISA REGALADA.
UNA CARICIA SILENCIOSA.
UNA PALABRA AGRADECIDA.
UN SILENCIO ACOMPAÑADO.
UNA MIRADA DE TERNURA.
UNA ESCUCHA ATENTA.
UN PASEO SIN PRISA.
UNAS MANOS SERVICIALES, CARGADAS DE AMOR.
UNA DISCULPA ANTE LOS ERRORES AJENOS...
Sólo desde el SILENCIO y la GRATITUD, desde lo GRATUITO, las
SEMILLAS DEL REINO germinan en vida y transforman el mundo.