"Por cada kilómetro de sueños, centímetros de realidades".
La hermana, que me la dijo hace ya más de 25 años, quizá no tuviera la intención de grabarla de tal modo en mí...., pero muchas veces vuelvo a ella..., como signo de ESPERANZA. Para seguir avanzando, caminando pese a... (tantos "peses" que surgen a veces.).
Un pasaje precioso que nos regala la liturgia en estos días es EMAÚS.
Hace poco alguien escribía en twitter: "Dos que caminaban, que eran tres...".
En ese camino, de desolación, de pena, de abatimiento, de huída...
JESÚS SE HACE EL ENCONTRADIZO (me encanta este término...), les sale al paso, se hace compañero de camino y de posada... y allí vuelve en el diálogo y el ENCUENTRO a arder el corazón...
Por el camino era... "NOSOTROS ESPERÁBAMOS..." Me hace reflexionar (ya comenté en alguna entrada durante la cuaresma...), dónde o en quién pongo mis esperanzas....
En la personas, los destinos, los trabajos, las tareas, las amistades, los éxitos, los fracasos... ( hay tanto por añadir a la lista....).
EN ÉL SOLO NUESTRA ESPERANZA Y LA SALVACIÓN, dice el estribillo de un himno de vísperas...
Esta es la realidad... EL ES LA ESPERANZA, y desde ahí, se pueden construir los kilómetros de sueños... Sólo reconociendo que El SEÑOR, es quién debe llenar mi vida de sentido, de realidad, de VIDA....
Todo lo demás, pese a que lo quiera negar...¡pasa...! . El éxito, el logro, la conquista, la admiración, o el desprecio, el trabajo, o el descanso, la felicidad o la tristeza, el gozo, o la alegría....incluso hasta la amistad, puede pasar...
Nuevamente la pregunta EN QUÉ O EN QUIÉN PONGO MI ESPERANZA, para no volverme "derrotada a mi Emaús".
Sino para descubrir a JESÚS COMO COMPAÑERO DE CAMINO, en cada tramo del camino.
Será, que tengo que pedir: SEÑOR, ILUMINA MI MENTE Y MI CORAZÓN, PARA RECONOCERTE EN TUS SIGNOS... EN LA PALABRA, EN LOS COMPAÑEROS Y COMPAÑERAS DE CAMINO, EN LA FRACCIÓN DEL PAN...
En cada acontecimiento.